Por: José Centurión Ruiz (*)
• En el primer mes del gobierno nacionalista que encabeza Ollanta Humala, se han tomado algunas decisiones que la mayoría de los peruanos esperábamos desde hace mucho tiempo, demostrándose que sí era posible realizarlas sin que se afecte ningún derecho ni contrato de estabilidad firmado por el estado peruano.
• Estas acciones son parte de las promesas electorales que ofreció el ahora presidente en su campaña electoral, recibiendo las críticas de los políticos y periodistas “ayayeros” del sistema que clamaban que eran perjudiciales para el país y que las inversiones futuras estaban en peligro.
• Se demuestra así, que cuando existe voluntad política, autonomía y resolución, las acciones de un gobierno que se compromete con las verdaderas necesidades de la nación y la ciudadanía, son en beneficio de las grandes mayorías y de nuestra patria.
• Ahora falta que se inicie una exhausta investigación de parte de las autoridades judiciales, para que la corrupción de los últimos gobiernos se castigue y darle confianza y esperanza a los peruanos que estamos cansados de la inmoralidad, degeneración y podredumbre de los políticos y funcionarios del estado que se enriquecieron a costa de él.
Sólo un mes ha pasado desde que asumió el nuevo gobierno las riendas de la dirección del estado peruano, y se nota la diferencia. No es gran cosa, pero se demuestra en los hechos que el pueblo no se equivocó cuando eligió al candidato de la esperanza y repudió la propuesta de la mafia y la corrupción.
En los primeros treinta días el gobierno de Gana Perú, ha logrado que los peruanos entendamos que si es posible hacer un gobierno para los peruanos más pobres y dejar de privilegiar a los ricos y las transnacionales. A pesar de los berrinches de los asalariados de la pluma y sus “analistas”, la clase empresarial ha tomado cuenta de que éste gobierno no cederá a sus presiones ni a sus chantajes.
Qué se ha logrado
Quizás no mucho, pero se avanza. El aumento de la Remuneración Mínima Vital a 750 nuevos soles en dos tramos fue la primera medida a favor de los trabajadores que ganan este salario. Además, se promulgó la Ley de Salud y Seguridad en el Trabajo que el gobierno anterior se negó a hacerlo.
La Ley de Consulta Previa que obliga a tomar en cuenta la opinión de los pobladores donde se pretenda realizar alguna obra o explotar alguna riqueza de nuestro subsuelo, es otra de las acciones tomadas en este primer mes de gobierno. Recordemos que al no aprobarse esta ley, tuvimos que presenciar la muerte de ciudadanos peruanos de la policía y de los nativos.
Hasta un ex futbolista y un aparente político progresista salieron a decirnos que no podíamos aplicar más impuestos a las mineras, porque nos hacían menos competitivos que otros países de la región y que podríamos perder miles de millones de dólares de inversión. Pero se negoció con ellas y se logró que en el próximo quinquenio se les aplique un gravamen anual de un mínimo de 3,000 millones de soles, a diferencia del gobierno de García que sólo “logró” un óvolo de 500 millones y les dejó hacer lo que les venía en gana.
Por último, a pesar de la negativa y resistencia del consorcio Camisea, se está negociando para que el lote 88 sea para el consumo de todos los peruanos y no para la exportación, como lo firmaron los gobiernos de Toledo y García en sus respectivos momentos.
Quizás para muchos sea poco o casi nada, pero lo que debemos entender que se debe avanzar con paso firme y sin cometer errores. Si este gobierno fracasa, será motivo para que la derecha recalcitrante afile sus garras para hacerlo añicos. Por lo tanto, es necesario que los trabajadores estemos expectantes de los acontecimientos y apoyar todo lo que consideremos progreso, desarrollo y prosperidad para nuestro pueblo.
Luchar contra la corrupción
y castigar a los culpables
Corresponde a este gobierno llevar a cabo la promesa electoral que quizás fue categórico en la campaña: la lucha contra la corrupción. Y es algo que todos los peruanos esperan convencidos que es determinante esta cruzada para poder entrar en el camino al desarrollo y la inclusión social.
Y esperan también, que se investiguen todas las tropelías e irregularidades que el gobierno saliente deja en el camino. Nadie puede pensar en que una exploración y pesquisa de todo lo actuado esta demás, luego de enterarnos que desde el más alto nivel del gobierno anterior, se decidían las licitaciones y otros. No nos pueden engañar otra vez y regresar en el 2014 como si nada hubiera pasado.
• En el primer mes del gobierno nacionalista que encabeza Ollanta Humala, se han tomado algunas decisiones que la mayoría de los peruanos esperábamos desde hace mucho tiempo, demostrándose que sí era posible realizarlas sin que se afecte ningún derecho ni contrato de estabilidad firmado por el estado peruano.
• Estas acciones son parte de las promesas electorales que ofreció el ahora presidente en su campaña electoral, recibiendo las críticas de los políticos y periodistas “ayayeros” del sistema que clamaban que eran perjudiciales para el país y que las inversiones futuras estaban en peligro.
• Se demuestra así, que cuando existe voluntad política, autonomía y resolución, las acciones de un gobierno que se compromete con las verdaderas necesidades de la nación y la ciudadanía, son en beneficio de las grandes mayorías y de nuestra patria.
• Ahora falta que se inicie una exhausta investigación de parte de las autoridades judiciales, para que la corrupción de los últimos gobiernos se castigue y darle confianza y esperanza a los peruanos que estamos cansados de la inmoralidad, degeneración y podredumbre de los políticos y funcionarios del estado que se enriquecieron a costa de él.
Sólo un mes ha pasado desde que asumió el nuevo gobierno las riendas de la dirección del estado peruano, y se nota la diferencia. No es gran cosa, pero se demuestra en los hechos que el pueblo no se equivocó cuando eligió al candidato de la esperanza y repudió la propuesta de la mafia y la corrupción.
En los primeros treinta días el gobierno de Gana Perú, ha logrado que los peruanos entendamos que si es posible hacer un gobierno para los peruanos más pobres y dejar de privilegiar a los ricos y las transnacionales. A pesar de los berrinches de los asalariados de la pluma y sus “analistas”, la clase empresarial ha tomado cuenta de que éste gobierno no cederá a sus presiones ni a sus chantajes.
Qué se ha logrado
Quizás no mucho, pero se avanza. El aumento de la Remuneración Mínima Vital a 750 nuevos soles en dos tramos fue la primera medida a favor de los trabajadores que ganan este salario. Además, se promulgó la Ley de Salud y Seguridad en el Trabajo que el gobierno anterior se negó a hacerlo.
La Ley de Consulta Previa que obliga a tomar en cuenta la opinión de los pobladores donde se pretenda realizar alguna obra o explotar alguna riqueza de nuestro subsuelo, es otra de las acciones tomadas en este primer mes de gobierno. Recordemos que al no aprobarse esta ley, tuvimos que presenciar la muerte de ciudadanos peruanos de la policía y de los nativos.
Hasta un ex futbolista y un aparente político progresista salieron a decirnos que no podíamos aplicar más impuestos a las mineras, porque nos hacían menos competitivos que otros países de la región y que podríamos perder miles de millones de dólares de inversión. Pero se negoció con ellas y se logró que en el próximo quinquenio se les aplique un gravamen anual de un mínimo de 3,000 millones de soles, a diferencia del gobierno de García que sólo “logró” un óvolo de 500 millones y les dejó hacer lo que les venía en gana.
Por último, a pesar de la negativa y resistencia del consorcio Camisea, se está negociando para que el lote 88 sea para el consumo de todos los peruanos y no para la exportación, como lo firmaron los gobiernos de Toledo y García en sus respectivos momentos.
Quizás para muchos sea poco o casi nada, pero lo que debemos entender que se debe avanzar con paso firme y sin cometer errores. Si este gobierno fracasa, será motivo para que la derecha recalcitrante afile sus garras para hacerlo añicos. Por lo tanto, es necesario que los trabajadores estemos expectantes de los acontecimientos y apoyar todo lo que consideremos progreso, desarrollo y prosperidad para nuestro pueblo.
Luchar contra la corrupción
y castigar a los culpables
Corresponde a este gobierno llevar a cabo la promesa electoral que quizás fue categórico en la campaña: la lucha contra la corrupción. Y es algo que todos los peruanos esperan convencidos que es determinante esta cruzada para poder entrar en el camino al desarrollo y la inclusión social.
Y esperan también, que se investiguen todas las tropelías e irregularidades que el gobierno saliente deja en el camino. Nadie puede pensar en que una exploración y pesquisa de todo lo actuado esta demás, luego de enterarnos que desde el más alto nivel del gobierno anterior, se decidían las licitaciones y otros. No nos pueden engañar otra vez y regresar en el 2014 como si nada hubiera pasado.
(*) Responsable del Departamento de Prensa y Comunicaciones de la CGTP
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